Se planteaba en la mesa redonda por qué existe pobreza en el mundo y si hay hambre desde una perspectiva global y, por último, si hay pobreza en España. Y respondían personas con opiniones distintas, pero que han coincidido en algo: que hay pobreza y que se puede resolver cambiando las estructuras y, en eso, es importante el trabajo de las administraciones y, también, un cambio en las personas.
El Atrio de los Gentiles proponía debatir sobre la pobreza en el mundo y, para eso, invitaba a diversas personas, como Marta Ochayta (Comedor social de Cáritas y ACCEM), Teresa Luengo (DiDeSur), Pilar Simón (Manos Unidas), Beatriz Parra (Cáritas), Luis Bueno (trabajador del Ayuntamiento de Guadalajara), Jesús Sanz (Rincón Lento) y Carmen Hombrados (Banco de Alimentos).
Cada uno explicó cómo es su experiencia lidiando con la pobreza. Ochayta relataba que el comedor social de Cáritas y ACCEM ya son unas 350 personas las que acuden a comer cada día y que tienen otras 250 personas que acuden alsupermercado solidario. Reconocía que el número varía de mes a mes y que va aumentando desde el inicio de la crisis.
Teresa Luengo apostaba por cambiar las cosas con las acciones. En su opinión, las organizaciones que trabajan por erradicar la pobreza deben tener en cuenta que las cosas no se resuelven con una tienda de comercio justo, sino con lucha política, cambiando las estructuras. "El trabajo que hacen las organizaciones no sustituye al trabajo de la Administración porque antes había becas de comedor escolar y las han suprimido y los libros ya no son gratis" comentaba. También, se refería a que la crisis tiene nombre de mujer, porque están volviendo a sus casas y se invisibiliza su trabajo.
Pilar Simón hacía hincapié en que en los países en vías de desarrollo se está notando más la crisis que aquí, porque se agudiza un problema que siempre hubo. En su opinión, el problema es estructural, ya que, el mundo tiene recursos suficientes para que lleguen a todos y es nuestra labor lograr que el reparto sea más equitativo. Por eso, apostó por cambiar las mentalidades y alejarnos del consumismo.
En el ámbito local, indicó que, como maestra, ha observado que hay niños que llegan al colegio sin haber comido, que en España no hay un problema de desnutrición, pero sí de malnutrición y que la ayuda puntual que se hace no sirve para solucionar el problema del todo.
En este problema de dar desayunos a los niños están trabajando hombro con hombro el Banco de Alimentos y el Ayuntamiento de Guadalajara. Carmen Hombrados explicó el trabajo que se hace en esta organización y reconocía que están recibiendo mucha ayuda para poder ayudar, pero que le preocupa lo que pasará al año que viene.
Por su parte, Bueno realizó un relato tremendo de la cantidad de familias que acuden a los servicios sociales del Ayuntamiento porque o bien no tienen ningún ingreso o sólo sobreviven con 426 euros al mes. Explicaba que se están dando ayudas para pagar el alquiler y la luz, que se tratan de realizar todo tipo de ayudas para estas personas, pero que es muy difícil llegar a todo el mundo.
En definitiva, coincidían en que hay más pobreza causada por la crisis, que esta puede llegar a todo tipo de personas y, desde el público, se reflexionó que, si renunciamos a algunas cosas y nos proponemos vivir con menos, quizá podría ayudar a otras personas.
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